El funcionario del Ministerio Público Fiscal aseguró que se reunieron todas las evidencias, que establecen con claridad las circunstancias de los abusos sexuales reiterados sufridos por la víctima de 11 años.
Al respecto, el fiscal Martín Oneto manifestó que la menor vivía junto a su grupo familiar, en el cual estaba incluido el imputado, ya que era cónyuge de su progenitora. “Así es como el acusado aprovechaba cada situación en la que la víctima quedaba a su cuidado, para accederla carnalmente en distintas oportunidades”.
Según el representante del MPF, en el expediente figura la denuncia hecha por un familiar de la menor; las declaraciones testimoniales del personal policial, ratificadas en sede judicial por su actuación en el sumario policial; el relato de la víctima de 13 años, a través de Cámara Gesell y el reporte del médico forense, quien en su informe legal hace constar que la menor fue víctima de abuso sexual.
Por ello, el fiscal aseguró que en los elementos probatorios detallados “quedaron acreditadas las circunstancias en las que se comprueba la existencia del hecho y la responsabilidad criminal del imputado L. M. en la comisión del delito ´Abuso Sexual con Acceso Carnal Agravado por la Situación de Convivencia Preexistentec– Delito Continuado´ (Art. 119 tercer y cuarto párrafo Inc. F del C.P.A)
De esta manera, el funcionario del MPF consideró que se reunieron los elementos probatorios suficientes para endilgarle al acusado el hecho delictivo, y en consecuencia, le solicitó a la jueza Jésica Díaz Marano, que eleve la causa a juicio.